Belinda se transforma en oso durante una conferencia de prensa y mata a reportero

• Esta es la foto más reciente que
tenemos de Belinda.

CIUDAD DEL CRIMEN.- Le colmaron la paciencia. La orillaron al delito. Le llenaron el bote de piedritas. La arrojaron a los brazos del crimen. Llámelo como quiera, pero esta vez Belinda cruzó la delgada línea entre ser una simple mala artista con voz de pito de bicicleta que vive del escándalo, a ser una peligrosa transformista asesina de buenos miembros de la comunidad periodística.
Vea usted nomás.
Mientras Belinda, la popular cantante que pasará a la inmortalidad por la canción "Pobre boba niña nice" se encontraba promocionando su nuevo disco "Cebollitas calientes", tuvo un conato de bronca con un reportero de ¿quién más va a ser? de TV Notas. Ya ve usted como joden ellos.
Pasó así: Los de la disquera de Belinda ya nos habían advertido a los medios serios y a los serios medios que no hiciéramos preguntas "impertinentes" a la cantante. Eso puso en un gran apuro a la gran familia periodística de México, porque ¿qué cosa "seria" la podemos preguntar a Belinda?
Bueno, la rueda de prensa se desarrolló con un alto grado de tensión. El micrófono rolaba entre los medios, de pregunta tonta a pregunta estúpida, hasta que cayó en las pezuñas del compañero de TV Notas. Y entonces sí, se armó la rebambaramba.
El reportero de TV Notas, de quien omitiremos su nombre pues no lo recordamos, comenzó a preguntarle a Belinda:
"¿Oye, y cómo quedó todo con Giobrandy DosTragos y tu, Beli, ya no hay yeah yeah entre ustedes?"
"Oye, Beli, ¿no comes, o porqué estás tan flaca? Desde aquí puede verte las venas y las arterias"
Oye, Beli, ¿a este nuevo disco que lanzaste, le llamas música? Me parecen los chiquillos de una vaca a punto de ingerir cianuro".
Y así, una pregunta ofensiva tras otra. Fue entonces que Belinda, desoyendo los consejos de los monjes Dalay, se levantó del sofá donde estaba sentada (ni modo que parada), profirió un agudo grito, y acto seguido, como si se tratara de Optimus Prime...SE TRANSFORMÓ EN UN OSO Y SE COMIÓ AL REPORTERO.
Después, nos fuimos, pues se acabaron las galletas. Nuestro más sentido pésame a los osos, que ahora comparten especie con Belinda.