*Las pistas estuvieron allí, todo el tiempo. |
El hilito que comenzamos a jalar para descubrir la verdad fueron unas supuestas fotos de Lady Gaga en bikini (no vamos a explicar cómo o por qué estábamos viendo eso). En el trance erótico de dichas imagenes, notamos que en medio de las piernas de Lady Gaga están las rodillas...turumpssst.
No, ya en serio, pues nos dimos cuenta de que pues había como un bultillo rarillo allí donde las damas pues no deberían tener nada. Entonces, todo comenzó a precipitarse.
Quien sabe por qué, pero a nuestras modernas oficinas llegaron unos reveladores archivos que detallaban el origen de Lady Gaga, o mejor dicho, Roberto Contreras, antiguo vendedor de tostadas en la Escandón, alías "El Bubu", y quien era acusado por los vecinos del lugar por ser un carero, ponerle sedimento a las tostadas de papa, y sobre todo, ser muy "enfadoso, hijo de su pu....ma... que la chi... veinte mil veces en patines". Así dijeron ellos.
De acuerdo a los aborígenes del lugar, Lady Roberto Gaga Contreras llevaba una doble vida. Por las mañanas, vendía su porquería en un carrito de esos que prestan en Walmart y que este cabrón se robó; por las noches, hacía actos trasvesticos vestido como Mónica Naranjo y Tatiana. Total, algún turista-productor gabacho lo vio, se le ha de haber hecho curioso y decidió llevárselo. Deberíamos estar agradecidos con él...pero no.
Y no porque, los vecinos de la Escandón podrán haberse librado de ese vendedor de obesidad mórbida, pero ahora todo el mundo tiene que soportar los desfiguros y berridos de esta cosa llamada Lady Gaga. De acuerdo a varios astrólogos y lectores de Tarot, a Lady Gaga no le espera un futuro prometedor. Será devorada por un ornitorrinco en celo, vomitada y luego pisada por una ballena azul manejando un tractor. Así la cosa.
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